CALIDAD DE LA INFORMACIÓN ESTATAL EN LATINOAMÉRICA

Importante: estas son herramientas en construcción, dinámicas y en continua evolución, las cuales se irán actualizando a medida que dispongamos de mayor cantidad y calidad de información por parte de los Estados y de las organizaciones territoriales implicadas.

La siguiente visualización permite identificar la antigüedad del último informe estatal sobre feminicidios y la calidad y profundidad de la información publicada.

SUBREGISTRO DE CASOS:

En este apartado analizamos ejemplos de subregistros de casos por parte de los Estados que surgen de comparar información proveniente de organizaciones del territorio. Es importante destacar que en muchos casos no fue posible realizar esta comparación por inexistencia o dificultad de acceso a la información.

Tal como hemos señalado en nuestro primer informe, la elaboración del MLF evidenció la falta de homogeneidad entre los países de la región para registrar los femicidios, encontrándose incluso divergencias al interior de los mismos.

No es un detalle: la generación de datos no solo es una responsabilidad internacional asumida por los Estados al haber ratificado la Convención Belén Do Pará[1], sino que además facilita el diagnóstico acertado y la posterior elaboración, evaluación y monitoreo de políticas públicas.

Según los datos recabados por MundoSur en colaboración con las organizaciones territoriales de la Red Latinoamericana contra la Violencia de Género, en Colombia, las fuentes estatales contabilizaban al 30 de junio 91 femicidios, mientras que las organizaciones territoriales denunciaban 241. Es decir, un 265% más.

Esta es una tendencia que se mantiene en el país ya que, a fin de mayo, desde MundoSur denunciábamos que la Fiscalía General de la Nación había registrado 66 casos entre el 1 de enero y el 31 de mayo de 2020, mientras que la Red Feminista Antimilitarista, por su parte, denunciaba para el mismo período 187 casos. Esto implica que, de cada 100 feminicidios ocurridos, solo 35 son registrados por el Estado.

El caso de Ecuador también es relevante, ya que mientras el Estado señalaba 29 femicidios al 30 de junio, las organizaciones territoriales denunciaban 53

[1] La Convención de Belém do Pará en su artículo 8 inciso h), señala que “los Estados Partes convienen en adoptar, en forma progresiva, medidas específicas, inclusive programas para: h) garantizar la investigación y recopilación de estadísticas y demás información pertinente sobre las causas, consecuencias y frecuencia de la violencia contra la mujer, con el fin de evaluar la eficacia de las medidas para prevenir, sancionar y eliminar la violencia contra la mujer y de formular y aplicar los cambios que sean necesarios”. De los países latinoamericanos relevados, solo Colombia ha ratificado este instrumento jurídico, mientras que los otros países de la región lo han ratificado.